El tomate esta considerado tanto como fruta como hortaliza, formado por un 94 % aprox de agua, proporcionando una gran cantidad de antioxidantes que nos ayudan a conbatir diferentes formas de cáncer.
El tomate contiene vitamina A, B, C, E y K así como calcio, fósforo, hierro, magnesio y potásio.
Su alto contenido en licopeno (antioxidante) ayuda en la prevención de enfermadades cardiovasculares dismuyendo los niveles de colesterol (LDL) y triglicéridos).
El tomate es bajo en sodio por lo que ayuda a reducir la hipertensión arterial.
Es rico en fibra por lo que ayuda a mejorar el tránsito intestinal.